Hágase sobre mi
tu palabra;
sobre mi piel, sin
nacer aún entre tus labios,
llena del negro
fluir de tu pelo,
hágase sobre mi
tu deseo,
entre mis manos, latiendo,
como tus
bronceados senos amplios
hágase en mi según
tu silencio,
y entre tus manos,
que aprietan mi
pecho añejo
hágase en mi tu
palabra virgen,
o más bien gemidos,
notas del placer
divino
y alegre de mi
gracia estarás llena,
y estaré contigo, dentro en ti
fluyendo,
blanco como alas
de un ángel caído
comulgando de tu pan, de tu vino,
transubstanciándome,
rompiendo íconos, haciendo nuevos rituales
comulgando de tu pan, de tu vino,
transubstanciándome,
rompiendo íconos, haciendo nuevos rituales
he aquí tu
esclavo,
el varón que no has conocido,
hágase en mi según
tu palabra.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario