lunes, 22 de septiembre de 2008

muérdete los labios

hoy que me tienes rabia
vas a buscarle;
vas a querer borrar mi lengua de tu piel

esta noche, bajo la sábana,
tu pierna buscará la suya,
con un trazo lento

y quizás ya dormido
se desenrede del abrazo del sueño
para corresponderte

buscarás la lentitud de mi abrazo,
pero hallarás prisa
y descuido

querrás encontrar mi olor,
mi mezcla de perfumes,
pero solo habrá el mismo olor de siempre

hoy que me tienes rabia
querrás hacerle el amor
a manera de desquite

estarás buscando ese algo,
eso que estás buscando
hace siete años

lo que no te dio el primero,
ni el transitorio,
ni el matrimonio

lo acariciarás, buscando una respuesta,
una excitación, pasión,
la explosión del orgasmo del olvido

buscarás su lengua en beso
y encontrarás el vacío de su aliento
buscando los besos que te desarman

hoy que me tienes rabia
querrás sentirle dentro de ti
en un intento fútil de exorcismo

y es que podrás querer olvidarme,
pero vas a tener que morderte los labios muy fuerte
por que se que mi nombre te nace

así que cierra los ojos;
trata de no pensar
y de no decir mi nombre

chuvosa 6

y todas las veces eres diáfana,
cristalina y libre;
fluyes por mi geografía y
entre cada camino,
erosionando mis rocas, nutriéndote
de los minerales de mi piel

y me recorres libre, o a veces
te vuelves hielo,
expandiéndote, contraria a todos
los otros líquidos

es en ese momento
cuando decido tocarte,
y te derrites, y te evaporas entre mis dedos;

solo para regresar como lluvia
a regar mis ojos

nota

no necesitas una rosa roja y marchita
porque estoy a tu lado