Yo no quiero llenarte de vacíos,
ni de contradicciones
ya otros se han encargado de eso
ni tampoco ser tu mejor amante,
contabilizar tus lunares,
o borrar de tu memoria el cinco de enero
yo sé que dentro de tí
dormitan partículas subatómicas
a punto de estallar con fuerza
no tengo una misión que cumplir,
no vengo a ser terapia o sanación,
lazarillo, compañero de fiestas
me basta con contemplarte desnuda
contra la pared, y la luz que te baña,
me basta tu espalda brillante
no quiero que ames a Sabina,
que escuches a Silvio y a Pablo,
ni que te vuelvas atea y comunista
y aunque conozco tus superficies,
tu afición sexual al blower y a la CocaCola
aún sigues inédita y virgen
aún puedo contar con las manos
las veces que te he visto
desde te hiciste familiar hace catorce años
y no busco revertir la condición de tu vientre
ni amarte para siempre,
tú bien sabes lo que doy
no vine aqui a engañarte,
sabes que cuando cierro los ojos y te abrazo
te vuelves mi respirar y mi aliento
y que aunque no es posible tener
el título de propiedad de mis lindes
hay una cuerda que te pertenece entre mi territorio
por eso te entrego la contabilidad
de las miradas, caricias, los besos y orgasmos,
para dejar todas las cuentas claras