viernes, 16 de febrero de 2007

Cuando hagamos el amor

Cuando hagamos el amor
no me fijaré en tu cuerpo
ni en sus imperfecciones

no criticaré tus pechos y su tamaño
tus caderas anchas, la cintura
no diré nada sobre tu barriga

no mencionaré tus piernas largas
tus pies, ni el comienzo de tus nalgas
no voy a decir nada de tu espalda

seré cuidadoso, pausado
mediré cada paso, cada abrazo
te cubriré si te da frío

cuando hagamos el amor
caerán rayos sobre las Tatras
Bratislava estará llena de luz

te vendaré los ojos y la boca
para que no pienses ni menciones otros nombres
llenaré tus oídos de nuevos sonidos

me posaré sobre ti como una nube
lloveré sobre tu blanca piel
sobre tus ojos cerrados

en total oscuridad guiaré tus manos
sobre mis cicatrices,
sobre mi pecho agitado

te abrazaré muy fuerte
estremeceré cada resquicio
como la furia de una avalancha

serán más sutiles las diferencias
más marcados los ritmos
y la sangre fluirá con mayor fuerza

cuando hagamos el amor
la boca te sabrá a mar,
y tu cabeza atardecerá sobre mi pecho