jueves, 19 de junio de 2008

de tu recuerdo

Volvió el olor de tu piel
vino tu sabor a miel
llegó a llenar mi silencio

justo en el centro irrumpió
puso en alerta el reloj
de mis recuerdos

después de tanto olvidé
el aroma de café
que destilaba tu piel
cuando te robaba un beso

pero un segundo cambió
lo que el corazón guardó
y mi cuerpo reventó
y me abrí al cielo

y me bastarán los montes
y los árboles de entonces
para del pasado eterno
traerme vivo tu recuerdo
y no bastarán sus labios
para curarme el resabio
que me dejó el no contarte...
cuanto me cuesta olvidarte

eras un rompecabezas
yo me conocía las piezas
y sus diseños

nunca te pude tener
yo nunca supe el por qué
y pasó el tiempo

y el destino me llenó
de mil flores del color
que se le da a la pasión
y me hice viejo

y de repente me hallé
inventándote al revés
y gritándole otra vez
a mi silencio

y me bastarán los montes
y los árboles de entonces
para del pasado eterno
traerme vivo tu recuerdo
y no bastarán sus labios
para curarme el resabio
que me dejó el no contarte...
cuanto me cuesta olvidarte

y en una tarde me vi
pensándote y comprendí
que me faltaba

de mi pasado un pedazo
y recordaba tu abrazo
y tu mirada

y me faltaba el verano
que te tomé de la mano
y aquella noche de copas
en que besaba tu boca

y me faltará una noche
y un beso tibio y un coche
y una sábana de verde
que entre tu cuerpo se pierde

y me bastarán los montes
y los árboles de entonces
para del pasado eterno
traerme vivo tu recuerdo
y no bastarán sus labios
para curarme el resabio
que me dejó el no contarte...
cuanto me cuesta olvidarte

hoy me llega tu silueta
y en los ojos se me injerta
tu piel tan blanca

hoy puede ser que me pierda
o que recuerde tu lengua
a mis anchas

allí a la orilla del mar
me sumergí en tu mirar
para dos besos robarte
con mis manos apretarte

para decirte al oído
que nunca pudo el olvido
llevar tu risa de junio
en aquella tarde juntos

y me bastarán los montes
y los árboles de entonces
para del pasado eterno
traerme vivo tu recuerdo
y no bastarán sus labios
para curarme el resabio
que me dejó el no contarte...
cuanto me cuesta olvidarte