miércoles, 15 de octubre de 2008

con cada día que pasa

con cada día que pasa
me adentro en tu laberinto,
girando a la izquierda
buscando el centro

pasa el tiempo
y eres cada vez menos misterio
menos idea, menos mito
y más carne, más mundo

ya tus ojos no son
aquel misterio veraniego
que refrescaba en viejas fotos
y recuerdos marchitos

ya tu boca no es
una singularidad
sino una multiplicidad
de sabores y embrujos

con cada día que pasa
eres menos de otro,
menos del pasado,
más mía

y no mía de que me perteneces,
sino mía de igual;
de mi propia sangre,
casi una hélice que pega mi adn

te exploro y te defino
con mis manos y mi boca,
y eres lengua antigua
que renace en mi cerebro

tu cuerpo antes selva
pasa a ser terreno conocido,
le escribo mapas a tu geografía,
navego sin instrumentos

jugamos a las preguntas
y a las confesiones,
y cada vez conozco más tus miedos
y tus verdades

y la caricia mística del tiempo
me devuelve los años perdidos,
y entiendo por fin tus secretos,
descubriendo que eres mi igual, mi complemento