Jugar para perder

Cuando nos miramos
juego a perder,
y queriendo que suceda,
sucedemos

y te pienso y existes
y mis dedos te invocan
y en señales te atraigo
y tus pulsos me tocan

y siempre que nos vemos
juego a perder,
y el tablero es una espalda
donde se ponen piezas

y tu voz, que se llena de noches
quiere gritar secretos,
atrapar en un beso el espacio,
dividir el tiempo en pedazos

y cuando nos hablamos
juego a perder,
y hablar contigo
es un rompecabezas

Y tus ojos indecisos
de paleta de colores
vuelan como un papel al viento
que danza suave

y cuando no te despides
juego a perder
y eres sonrisa
que escapa de mis labios

y aunque de mi piel
a la tuya hay un lazo
impronunciable, pierdo
sabiendo que he ganado

Café Colao Orchestra, Vol. 1.

Hoy sale a la calle mi nuevo álbum, que es un trabajo junto a Walter Morciglio, y se titula Café Colao Orchestra, Vol. 1. Son canciones de música tradicional borincana, escritas por mi y arregladas por Walter, en donde tomamos elementos de la canción tradicional de Puerto Rico, para luego destruirlos con un poco de modernidad, computadoras y cosas electrónicas. 

Me da mucho orgullo que este segundo álbum sea tan versátil, y que salga tan apropiadamente en la época navideña, aunque no sea un disco de música navideña.

Adquiéralo en CD Baby

Décimas a la ficción de la anexión

 Cuando meen las gallinas
cuando Colón baje el deo
cuando en matas de guineo
comiencen a crecer chinas
El día que la gasolina
sirva pa' mezclar con ron,
o cuando alguna canción
de Arjona me haga sentido
es que a mi pueblo querido
le van a dar la anexión

Cuando algún capitalista
done toda su fortuna
o cuando el sol sea la luna
y un camino una autopista
o cuando los comunistas
ganen alguna elección
Cuando balas de cañón
sirvan de fertilizante
será ese el día y no antes
que nos darán la anexión

Si el cielo se torna rojo
o se acaba el desempleo,
o el día que en un trineo
pase montado un gorgojo.
Si es que un mazo de matojos
compraras por un millón,
cuando hables por un pulmón,
cuando sonrías con el ceño
ese día a los borinqueños
les van a dar la anexión

El día que caiga nieve
allá en Coamo, en Palmarejo,
cuando sea nuevo lo viejo
y el cincuenta, diecinueve.
Cuando sea extenso lo breve
y lo seco sea humedad
Cuando la universidad
regale los doctorados
esos gringos desgraciados
nos darán la estadidad

Cuando en la gobernación
gane el PIP por una pela
y el día en que a las escuelas
se vaya sin pantalón
Si el alcalde borrachón
de un pueblo del sur perdiera
o el día que lo de afuera
pierda contra lo criollo
ese día, con mucho apoyo
la estadidad se pidiera

Y cuando el hambre se acabe
en África en un segundo
o tal vez cuando Edwin Mundo
deje de beber Ron Llave
Cuando un vals se toque en clave
y la salsa en clavicornio
tal vez cuando el unicornio
azul no sea comunista
Borínquen será estadista
y Luis Fortuño un bigornio