Soy puertorriqueño, 
  mayor de edad, 
   ateo, 
    padre de un niño, 
     casado,
      socialista cuasi-comunista, 
       en constante evolución, 
        independentista, 
         gruñón, 
          de ultra-izquierda, 
           músico, 
            ingeniero, 
             aprendiz de poeta, 
              políglota, 
               profesor,
sarcástico, sangrón y malcriado. 
Prefiero una palabra soez 
a un ataque al corazón. 
Según fuí pasando por la vida 
me dí cuenta que la religión 
fue algo que me metieron por ojos, 
boca y nariz, y que en realidad 
nunca creí en nada. 
Vivo en este mundo tratando 
de desaprender la mierda 
que me han enseñado en la vida. 
Trato de luchar a diario 
con mi tendencia a ser 
un idiota intransigente, 
cascarrabias, amargado e infeliz. 
Entre todo, no puedo decir que soy normal.
 No tengo un bachillerato de la inter, 
no tengo un toyota que se cree mercedes benz, 
no llevo prendas, no me gusta la musica a alto volumen, 
no me gusta aparentar lo que no soy, 
no tengo gustos ordinarios, 
no me gustan los deportes, 
no soy un autómata esclavo y conforme con la miseria.
Pero tengo una voz, y la voy a usar.
Pero tengo una voz, y la voy a usar.
 
 
No hay comentarios.:
Publicar un comentario