un silencio de blanca
en este cuarto oscuro
medio compás
un cuerpo se levanta
de puntillas seguro
un día más
la nota lo despierta
con tocar lujurioso
sobre la piel
en la barra se asienta
con frecuencia ruidosa
de alto nivel
su erecto pentagrama
de cinco barras anchas
cuatro espacios
a la nota reclama
y su sonido ensancha
siempre despacio
lo que silencio era
se transmuta en sudor
y en los gemidos
o el grito de una fiera
de mañana el calor
cinco sentidos
No hay comentarios.:
Publicar un comentario